Herencias

Muchos pleitos de herencias comienzan, y terminan en el mismo punto en el que comenzaron.

Las leyes sobre esta materia son claras. Pero la mayoría estos conflictos se basan en “reparticiones emocionales”. O sea “papa quiso que esto sea para mi”… “papa dijo que tú tienes profesión, entonces a ti no te toca nada”… O porque uno de los hermanos, se auto titula el protector de los últimos años de los padres, en consecuencia reclama mayor derecho (más bienes).

Luego de un largo juicio, casi se vuelve a lo mismo, es decir a la repartición en partes iguales para cada hijo, o heredero.

También es cierto, que si alguno de los hijos veló, o financio los últimos años de la salud de los padres, es obvio que hay que resarcirlos. Es decir compensarlos, pero no al extremo, de que sean los dueños de más allá de los que les toca.

Las herencias a veces son reclamadas solo por uno de los titulares, y los otros son marginados. Estos que quedaron al margen, si pueden reclamar su derecho, mediante diversas vías que nosotros conocemos perfectamente.